sábado, 15 de septiembre de 2012

FUCK YOU, MILTON FRIEDMAN !



FUCK YOU, MILTON FRIEDMAN! ¡A ti y a todos los neoliberales del mundo! FUCK YOU!

Joder, qué a gusto me he quedado. No hay nada como desahogarse para eliminar tensiones ¿a que sí? ¿Cómo? ¿Que no sabéis quién es ese sonriente señor de la foto de arriba ni por qué digo lo que digo? Pues para eso estoy yo aquí, criaturitas. Ahora mismo os lo aclaro, faltaría más. Ejem, ejem...

Milton Friedman (Nueva York 1912 - San Francisco 2006) fue un prestigioso economista e intelectual norteamericano de la Universidad de Chicago, ganador en 1976 del Premio Nobel de Economía y autor del celebérrimo libro 'Capitalismo y Libertad' (1962).


El corpus teórico de Friedman se articulaba en completa oposición a las ideas de John Maynard Keynes (1883-1946), economista británico anterior, padre de la llamada 'tercera vía' (en referencia a los dos grandes sistemas económicos -capitalismo y comunismo- que dividían el mundo desde 1917). El suyo era un modelo basado en un capitalismo suave, en el que el Estado regulaba y dirigía la economía, convirtiéndose en uno de los principales inversores para asegurar a la población unos bienes mínimos que permitieran mantener un razonable ritmo de consumo, de forma que este animase la producción, favoreciendo así un crecimiento económico continuo en el que se evitarían las grandes recesiones. Las ideas de Keynes tuvieron una gran influencia en el presidente norteamericano Franklin Delano Roosevelt, que las tomaría como modelo sobre las que fundar el 'New Deal' que sacaría a los EE.UU. con éxito de la Gran Depresión originada por el crack bursátil de Wall Street en 1929. En Europa, la aplicación de las ideas de Keynes darían lugar al llamado 'estado del bienestar', basado en la protección social, e instaurado en la mayor parte de naciones democráticas tras la Segunda Guerra Mundial con la ayuda del Plan Marshall.

Friedman Vs. Keynes.
A diferencia de las ideas keynesianas, Friedman se basaba en el modelo del liberalismo neoclásico del filósofo Adam Smith, en el que el mercado es la única fuente de riqueza. Los beneficios de las empresas serían el único motor del crecimiento económico, que según ellos, sólo se produciría cuando el mercado pudiera actuar con total libertad, lejos de la regulación y del arbitraje del Estado. Friedman pensaba que la intervención estatal distorsionaba el funcionamiento de los mercados, por lo que sus teorías propugnaban desmontar el 'estado del bienestar', privatizando los servicios públicos y dejando que actuasen libremente las leyes de la oferta y la demanda, volviendo a la pureza original del sistema definido por Smith. El mercado, con las manos libres para actuar, se regularía a sí mismo sin necesidad de la supervisión del Estado, que únicamente debería adoptar una pasiva postura de 'laissez faire, laissez passer'.

Por lo tanto, Friedman es el padre intelectual del moderno neoliberalismo económico, y sus seguidores conforman la llamada 'Escuela de Chicago'. Las legiones de friedmanitas no tardarían en extenderse por todo el mundo y en convertirse en la principal corriente ideológica dentro de las principales escuelas de pensamiento económico del mundo. El sistema neoliberal no sería más que un reflejo de la libertad individual del ser humano, y el capitalismo su máxima expresión.


Lo que propugna la 'Escuela de Chicago' es un modelo de capitalismo salvaje y descontrolado, parapetado en una noción desmadrada de la idea de libertad individual llevada al extremo, en el que el ciudadano se encuentra indefenso ante las grandes empresas y corporaciones privadas, desprotegido ante la mirada de un Estado que hace la vista gorda. Un sistema económico desregularizado en el que el pez grande siempre se come al pequeño, de manera inevitable. La ley del más fuerte. Tirando de metáforas un poco rudimentarias, sería como dejar que dos boxeadores pelearan sin la intermediación de un sistema de categorías por pesos. El peso pesado siempre ganaría por KO al peso pluma. O como dejar que se jugase un partido de fútbol sin árbitro. O permitir que un ladrón atraque una tienda por defender la libertad individual del ladrón para hacer lo que hace.

Viñeta de El Roto sobre las leyes del mercado aparecida en
el diario El País.
Por supuesto, la implementación de las ideas neoliberales en sociedades de tradición democrática no sería tarea fácil por la resistencia que pudieran oponer sus ciudadanos. Es por eso que los primeros experimentos 'neoliberales' se llevaron a cabo en los años 70 en países del cono sur con férreas dictaduras militares, como Chile o Argentina. Y en países occidentales más cercanos, como Gran Bretaña o los propios EE.UU., se implantaron tras los profundos shocks producidos por guerras o crisis económicas de fuerte calado social. Es por eso que a Milton Friedman se le puso el sobrenombre de 'Doctor Shock'.

Todo esto y más se explica en la magnífica película documental 'La Doctrina del Shock' (The Shock Doctrine, 2009) del cineasta Michael Winterbottom (autor de 'El Perdón', '24 Hour Party People' o 'Código 46'), un film apasionante, DE VISIONADO OBLIGATORIO para todo aquel que quiera saber qué es lo que está pasando hoy en el mundo. El documental se basa en el libro superventas 'La Doctrina del Shock: El Auge del Capitalismo del Desastre', de la periodista canadiense Naomi Klein, que participa así mismo en el documental, donde aparece en distintas universidades dando conferencias.


La tesis que argumenta el documental es a la postre bastante sencilla: SOMOS GOBERNADOS A TRAVÉS DEL MIEDO. Y eso explica muy bien lo que está pasando en Europa con la excusa de la crisis económica: estamos asistiendo al desmantelamiento del 'estado del bienestar', cuyos restantes servicios públicos -ya de por sí bastante escuálidos- se están privatizando entre amigos. Es ni más ni menos que el saqueo y robo de los bienes de los ciudadanos de una nación.

Hoy más que nunca convendría recordar las lejanas palabras de Roosevelt en el discurso del día de su investidura como presidente de los Estados Unidos, el mejor presidente en la historia de esta joven nación: 'There's nothing to fear but fear itself.' No hay que temer nada salvo al miedo mismo. Y hoy más que nunca sería momento de volver a las olvidadas teorías de Keynes, aquellas que a través del New Deal sacaron a EE.UU. del desastre, tal y como argumenta el economista argentino Axel Kicillof en su libro homónimo.


Os dejo con el documental íntegro de Winterbottom, de 77 minutos de duración. Eso sí, cuando terminéis de verlo, si lo véis, me gustaría que os unierais a mí en el siguiente grito unánime: FUCK YOU, MILTON FRIEDMAN! (¡Eh, podemos hacer camisetas con ese lema y la foto de Friedman!). XD


3 comentarios:

Enrique Hormigos dijo...

¡¡QUE TE FOLLEN, MILTON!!

Excelente documental, por cierto.
Volví a verlo el viernes en la2 y me volví a cagar en la madre de este tipejo como la primera vez que la ví.

¡VIVA KEYNES Y BERTRAND RUSSELL!

Hombre de Trapo dijo...

Es lo que tiene Milton Friedman, que como laxante no tiene precio. Cuando uno va un poco estreñido, te acuerdas de la madre de este tipo y evacúas cosa fina. Ni José Coronado con los bifidus activos, oye.

¡Y otro viva para ti, hombre! ¡Gracias por comentar!

Unknown dijo...

Capitalismo es libertad, lo siento :(