Cuaderno de bitácora de J. L. Lafuente. Blog sobre cómics, cine, fotografía, música, literatura y libre opinión. Un auténtico cajón de sastre.
viernes, 27 de diciembre de 2013
CENA RECALENTADA
Videoclip del grupo 'Golpes Bajos' emitido originalmente en 1984 dentro del programa 'La Bola de Cristal', de Televisión Española.
2 comentarios:
Anónimo
dijo...
Me apena por que me trae recuerdos de los tiempos heroicos de los fanzines en papel. Su música nunca me gustó. En la época en que había dejado a los Siniestro y tenía el "malos tiempos para la lírica" sonando en la radio, coincidió que un grupo de amigos y yo nos embarcamos en la odisea de editar un fanzine, y recuerdo que uno de los discos que se comentaron en la sección musical fue el de los Golpes Bajos. Su cambio fue motivo de discusión: Unos decían que era más auténtico cantando "me pica un Huevo"; otros que "No mires a los ojos de la gente" era pura poesía...y a los demás nos daba igual. Es lógico que en las televisiones se preste atención a su muerte y se obvie la de José Ortiz: tener un enorme archivo de imágenes de la Movida Madrileña facilita mucho el trabajo a los "periodistas" que tienen que rellenar unos minutos de informativo. Van a lo fácil. Ocurrió algo parecido cuando se murió Ray Charles: coincidió con el cincuentenario del pato Donald... y ya te puedes imaginar por donde tiraron los "profesionales" de los informativos.
Golpes Bajos tampoco ha estado nunca entre mis grupos favoritos, pero sus canciones siempre me han gustado, lo cual es paradójico. Su música se corresponde con una época y un momento creativo muy especial en España, y sólo por eso han contado invariablemente con mi simpatía.
Germán Coppini siempre fue mejor compositor que cantante. Sus canciones tienen ese hálito poético y melancólico que mencionas, aunque hubieran sonado mucho mejor en la voz de cualquier vocalista mejor dotado. Lo cual no quita que las canciones y sus letras sean intrínsecamente buenas, independientemente de las limitaciones vocales de Coppini. Al fin y al cabo, ¿desde cuándo ha hecho falta cantar bien para triunfar en el mundo del rock? Que le pregunten si no a Ozzy Osbourne. :)
Lo que sí es innegable es que las canciones de Coppini figuran en el cancionero popular de toda una generación. 'No mires a los ojos de la gente', 'Malos tiempos para la lírica'... o esta misma 'Cena recalentada'. Eso es meritorio.
El propio Coppini comentaba en una entrevista que estaba harto de ser considerado por todo el mundo como 'el gran traidor al espíritu de la Movida'. Es verdad que la música punk que hacía en los primeros tiempos de Siniestro Total no tenía nada que ver con el estilo de Golpes Bajos o su posterior carrera en solitario. Pero a esa leyenda de 'traidor' también contribuyeron sus antiguos ex-compañeros de Siniestro, que al poco de abandonar Coppini el grupo le dedicaron la canción 'Más vale ser punky que maricón de playas', del álbum 'El regreso'. Se ve que no les sentó demasiado bien su 'deserción'.
En cuanto a lo que comentas de la prensa, lamentable. Ya sabemos todos el nivel del periodismo español, la de sapos que tienen que tragar para poder trabajar en una profesión con una tasa de paro bestial. Y sobre todo de qué pie cojean algunos. Pero de eso no tiene la culpa el pobre Coppini (ni tampoco, ya puestos, el pato Donald). :)
2 comentarios:
Me apena por que me trae recuerdos de los tiempos heroicos de los fanzines en papel. Su música nunca me gustó.
En la época en que había dejado a los Siniestro y tenía el "malos tiempos para la lírica" sonando en la radio, coincidió que un grupo de amigos y yo nos embarcamos en la odisea de editar un fanzine, y recuerdo que uno de los discos que se comentaron en la sección musical fue el de los Golpes Bajos. Su cambio fue motivo de discusión: Unos decían que era más auténtico cantando "me pica un Huevo"; otros que "No mires a los ojos de la gente" era pura poesía...y a los demás nos daba igual.
Es lógico que en las televisiones se preste atención a su muerte y se obvie la de José Ortiz: tener un enorme archivo de imágenes de la Movida Madrileña facilita mucho el trabajo a los "periodistas" que tienen que rellenar unos minutos de informativo. Van a lo fácil.
Ocurrió algo parecido cuando se murió Ray Charles: coincidió con el cincuentenario del pato Donald... y ya te puedes imaginar por donde tiraron los "profesionales" de los informativos.
Jorge de Asturias.
Muy buenas, Jorge.
Golpes Bajos tampoco ha estado nunca entre mis grupos favoritos, pero sus canciones siempre me han gustado, lo cual es paradójico. Su música se corresponde con una época y un momento creativo muy especial en España, y sólo por eso han contado invariablemente con mi simpatía.
Germán Coppini siempre fue mejor compositor que cantante. Sus canciones tienen ese hálito poético y melancólico que mencionas, aunque hubieran sonado mucho mejor en la voz de cualquier vocalista mejor dotado. Lo cual no quita que las canciones y sus letras sean intrínsecamente buenas, independientemente de las limitaciones vocales de Coppini. Al fin y al cabo, ¿desde cuándo ha hecho falta cantar bien para triunfar en el mundo del rock? Que le pregunten si no a Ozzy Osbourne. :)
Lo que sí es innegable es que las canciones de Coppini figuran en el cancionero popular de toda una generación. 'No mires a los ojos de la gente', 'Malos tiempos para la lírica'... o esta misma 'Cena recalentada'. Eso es meritorio.
El propio Coppini comentaba en una entrevista que estaba harto de ser considerado por todo el mundo como 'el gran traidor al espíritu de la Movida'. Es verdad que la música punk que hacía en los primeros tiempos de Siniestro Total no tenía nada que ver con el estilo de Golpes Bajos o su posterior carrera en solitario. Pero a esa leyenda de 'traidor' también contribuyeron sus antiguos ex-compañeros de Siniestro, que al poco de abandonar Coppini el grupo le dedicaron la canción 'Más vale ser punky que maricón de playas', del álbum 'El regreso'. Se ve que no les sentó demasiado bien su 'deserción'.
En cuanto a lo que comentas de la prensa, lamentable. Ya sabemos todos el nivel del periodismo español, la de sapos que tienen que tragar para poder trabajar en una profesión con una tasa de paro bestial. Y sobre todo de qué pie cojean algunos. Pero de eso no tiene la culpa el pobre Coppini (ni tampoco, ya puestos, el pato Donald). :)
Saludos.
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