UN HOMBRE SE AHORCA ANTES DE SER DESAHUCIADO

Esquina de la calle Zegrí Montero y Arzobispo Guerrero.

Amigos y conocidos del hombre desahuciado en el lugar del suceso.

Este Jueves un hombre de 54 años se ha quitado la vida a las 09:10 de la mañana en Granada, la ciudad donde vivo, en la calle Zegrí Moreno con Arzobispo Guerrero, en la barriada de La Chana. Media hora antes la Policía Nacional se dirigía a su domicilio para hacer efectivo el desahucio decretado por el banco. El hombre no podía hacer frente al pago de su hipoteca.

Imaginad la desesperación que debía sentir este hombre para hacer lo que ha hecho hace apenas unas horas. El banco se queda el piso, pero su inquilino ha preferido quitarse la vida antes que verse reducido a la mendicidad.

Donde quiera que estés, descansa en paz, amigo. Mi más sentido pésame a todos sus conocidos y familiares.

En Granada, una ciudad de apenas 250.000 habitantes, hay una media diaria de 4 desahucios. Cada día, 4 familias granadinas se ven obligadas a vivir en la calle. Y no sólo eso, sino que además esta gente se verá lastrada económicamente de por vida, pues seguirán manteniendo su deuda con el banco. Estarán condenados para siempre a la marginación social por una banca que no acepta la dación en pago.

La misma situación se repite todos los días a mayor escala en cualquier punto de España. La gente que pierde sus hogares no son fríos números, no son una estadística más. Tienen cara y ojos.

Y todo esto sucede tan sólo un día después de que el Consejo General del Poder Judicial hiciera público el informe en el que considera terriblemente injustas las prácticas a las que los bancos someten a sus deudores.

La sangre de este granadino recae directamente sobre el banco que lo ha expulsado de su casa. Así de claro. Ellos le pusieron la soga al cuello, no sólo metafóricamente. Diría que su muerte recaerá sobre su conciencia de no saber a ciencia cierta que la banca no tiene conciencia. Nunca la ha tenido.

Nosotros, la ciudadanía, no podemos permitir que estas situaciones tan injustas se reproduzcan y se alarguen en el tiempo. Ni un sólo desalojo más.

¡¡STOP DESAHUCIOS!!